a prensa digital agoniza entre popups y publicidad invasiva. El modelo de suscripción no salvó al periodismo: solo creó nuevas dependencias. Los medios bailan al son de sus propietarios y suscriptores, la verdad se adapta al mejor postor. La gente migra a influencers que al menos son transparentes con sus sesgos. Ironía máxima: con más información que nunca, es más difícil estar informado. Y aún no hemos visto nada: la IA amenaza con hacer imposible distinguir realidad de ficción. El futuro del periodismo es un abismo de desinformación y manipulación. #CrisisPeriodismo #MediosEnPeligro