Cuando me uní a las Juventudes Comunistas a finales de la década de los 70, pensaba que tenía las ideas claras. Para mi lo progresista, social, lo lógico siempre ha sido la unión de los pueblos y de las personas por un bien común. Si lo quieres llamar comunismo, se lo llamas. Nunca me imaginé que partidos de izquierdas futuros pudieran llegar a ser independentistas en el siglo XXI.
No lo entiendo; yo explico a mis hijos siempre el siguiente ejemplo: Tienes dos ciudades que comparten destino, Madrid y Ceuta. Si eres Ceutí y eres independentista, eres gilipollas. Siendo el hermano desafortunado por las circunstancias que se quiere ir del rico y privilegiado para ser más pobre todavía. Y si eres de Madrid y quieres abandonar a tu hermano Ceutí eres un egoísta que no desea compartir su buena fortuna con el hermano desdichado.
Unir y compartir. Eso es lo social, lo progresista, lo lógico; y el único futuro posible de las sociedades en paz.